Como bien sabemos, las lenguas están vivas. Es decir, un idioma no es un instrumento de comunicación estático, inmutable. Por el contrario, continuamente incorpora vocablos de otros idiomas con los que entra en contacto. El actual idioma español se ha construido en contacto con otras muchas lenguas. De manera muy especial, las lenguas indígenas del continente americano influyeron mucho sobre él. En esta entrada de nuestro blog hablaremos de las primeras palabras procedentes de América que se incorporaron a nuestro diccionario. Es decir, de los primeros americanismos.
El Diccionario de Autoridades
Para empezar, conviene recordar que la Real Academia de la Lengua nació en 1713. Y, como es lógico, una de las primeras preocupaciones de esta institución fue crear un diccionario para regularizar el buen uso del idioma. Pero este primer diccionario no se llamaba como hoy. Se denominaba Diccionario de Autoridades. ¿Por qué? Puede que hoy nos resulte extraño o poco democrático, pero, en aquel tiempo, las jerarquías eran más sólidas y este rasgo cultural también se expresaba en el uso del idioma. Se consideraba que para afianzar una norma culta había que fijarse en como escribían los mejores, aquellos escritores que “han tratado a la Lengua Española con la mayor propiedad y elegancia”. Entre 1726 y 1729 se publica el primer Diccionario de Autoridades. En el mismo, ya aparecen algunas palabras que provienen del territorio americano.
El caimán y otros términos antillanos
Puesto que Las Antillas fue el primer territorio habitado por españoles en América, es lógico que hayan sido palabras de este lugar las primeras en viajar a España y, años después, integrarse en el primer diccionario confeccionado por la Academia. De manera que, una de las primeras palabras que se encuentran el primer Diccionario de Autoridades es caimán. Seguramente este animal impresionó mucho a los primeros conquistadores. El diccionario lo describe así: Béstia Amphibia, mui semejante al Crocodílo, de gran cuerpo y longitud, que se cría en las rias de las Indias y en algunas Islas.
El “inglés” de la época: el taino
La palabra caimán procede del taíno. Esta lengua indígena, de la familia arahuaco, se hablaba en las Antillas durante la época de la conquista española. Y pronto se hizo la más popular. Hasta el punto de que se utilizaba para entenderse con diferentes grupos indígenas que hablaban lenguas distintas. El taino, por así decirlo, se convirtió en la lengua “comodín” en que todos podían entenderse, más o menos. Una especie de inglés de la época.
Fue tal la importancia del taino que, en las crónicas de indias ( las primeras narraciones que los españoles hicieron de la conquista ) el 30% de los indigenismos que se recogen son de origen taino. Algunos fueron tan importantes que pasaron a formar parte del vocabulario español, aun antes de que hubiera diccionario. Es el caso de canoa, el americanismo más antiguo de la lengua española. Colón lo recogió en sus crónicas:
Dixeron los indios que llevaba que avía de ellas a Cuba andadura de día y medio con sus almadías, que son navetas de un madero adonde no llevan vela. Estas son las canoas.
Americanismos: un torrente de voces
Hoy en día contamos con un Diccionario de Americanismos con más de 70 mil entradas. Todo un torrente de voces que han enriquecido el idioma castellano hasta extremos asombrosos. Los primeros americanismos marcaron el camino de una lengua flexible e integradora que se ha ido construyendo con influencias muy diversas para convertirse en una de las mayores vías de comunicación del género humano.